Tecnología para gestionar riesgos de inundaciones y crear ciudades resilientes
Las inundaciones se encuentran entre los desastres naturales más devastadores del planeta. En cuestión de horas pueden destruir ciudades, interrumpir economías locales y dejar a miles de personas sin hogar. Este fenómeno, generalmente causado por lluvias intensas en un corto período de tiempo, sobrepasa la capacidad de absorción de los ecosistemas urbanos y rurales.
Por: Rafael Colucci. Gerente del equipo técnico de Autodesk en México. Ciudad de México, 02/09/2025
Impactos recientes en el mundo
En 2021, una lluvia intensa de solo cuatro días provocó pérdidas estimadas en 46 mil millones de euros en varias regiones de Europa, obligando a más de 16 mil personas en Alemania a abandonar sus hogares.
En Brasil, en 2024, el estado de Rio Grande do Sul fue devastado por lluvias extremas. Lamentablemente, 184 personas perdieron la vida, 26
permanecen desaparecidas y cientos de animales resultaron afectados. Los daños materiales se estiman en 12 mil millones de dólares.
En América Latina, el panorama es similar. En México, las lluvias torrenciales afectan de manera recurrente a comunidades y propiedades. Solo en 2023, los desastres naturales generaron pérdidas de 89,9 mil millones de pesos, de los cuales el 98% estuvo relacionado con lluvias.
El problema no es nuevo: entre 2002 y 2016, más de 67 mil personas y 12 mil hogares se vieron afectados por inundaciones en el territorio mexicano.
El impacto silencioso de las inundaciones
Más allá de la destrucción visible, existe un desafío silencioso: la contaminación de ríos y lagos. Las aguas pluviales arrastran contaminantes presentes en los suelos urbanos, degradando la calidad del agua y afectando la salud de la población, así como la fauna y la flora locales.
Enfrentar este problema requiere de una acción conjunta entre gobiernos, sector privado y sociedad civil, a través de proyectos integrados que reduzcan riesgos antes de que las inundaciones se conviertan en catástrofes de difícil gestión.
La importancia de los estudios de inundación
Una herramienta esencial en este proceso son los estudios de inundación. Estos permiten identificar las áreas que serán impactadas por eventos extremos de lluvia y planificar medidas preventivas.
Para ser efectivos, deben integrar datos de topografía, uso del suelo, registros históricos de lluvia, información de cuencas hidrográficas y cursos de agua existentes. Con estos insumos es posible prever el desplazamiento de las ondas de inundación, calcular tiempos de llegada a puntos críticos y estimar la capacidad de amortiguamiento del terreno.
Softwares especializados como Infoworks ICM, Infodrainage y HEC-RAS permiten realizar simulaciones hidráulicas e hidrológicas con gran precisión, generando modelos matemáticos que identifican las zonas de riesgo.
Gracias a los avances tecnológicos y a la integración de información en entornos comunes de datos, estos estudios están logrando resultados cada vez más confiables. A continuación, se presentan dos casos de referencia inspiradores.
Caso 1 – Sistema TATUS en Turquía
En Turquía se desarrolló el Sistema de Predicción y Alerta de Inundaciones (TATUS), diseñado para reducir riesgos antes de que ocurran eventos catastróficos.
El sistema combina modelos hidráulicos e hidrodinámicos con análisis meteorológicos, permitiendo simular en tiempo real el comportamiento de las inundaciones. En pruebas realizadas con Infoworks ICM e Infoworks Live, la diferencia entre los resultados previstos y los datos reales fue de apenas 3%, lo que demuestra una precisión sobresaliente
Gracias a esta herramienta, la Dirección General de Gestión de Aguas del Ministerio de Bosques y Agricultura espera salvar vidas y minimizar los impactos económicos de las inundaciones en todo el país.
Así concluímos que sistemas de alerta temprana son fundamentales para salvar vidas y optimizar la gestión de emergencias.
Caso 2 – Recuperación de lagos en Baton Rouge (EE. UU.)
En Baton Rouge, Luisiana, la Universidad Estatal de Luisiana lideró un proyecto de sostenibilidad para recuperar seis lagos artificiales construidos en la década de 1930.
Con el tiempo, estos lagos se volvieron cada vez más superficiales, perdiendo su capacidad de filtrar nutrientes provenientes de las lluvias. Esto provocaba una proliferación masiva de algas, que en épocas cálidas asfixiaban a los peces y transformaban los lagos en ambientes hostiles para la vida acuática.
La solución fue un plan integral de restauración que incluyó dragado, remoción de vegetación sumergida y renovación del entorno, incorporando ciclovías, senderos peatonales e incluso un nuevo puente.
El Infodrainage fue la herramienta central del proyecto, integrando datos de diversas fuentes, modelando áreas de biorretención y planificando redes de drenaje sostenibles.
Este ejemplo refuerza la importancia de la planificación integrada de drenaje urbano puede combinar ingeniería, medio ambiente y calidad de vida, transformando problemas en oportunidades de desarrollo sostenible.
Conclusión
Los ejemplos de Turquía y Luisiana muestran que, aunque las inundaciones no pueden evitarse por completo, sus impactos pueden reducirse drásticamente mediante la ciencia, la tecnología y la colaboración interinstitucional.
Los estudios de inundación, sumados a sistemas de predicción, proyectos sostenibles y una gestión conjunta entre sociedad, empresas y gobiernos, representan la clave para proteger comunidades, preservar ecosistemas y construir ciudades resilientes.
Invertir en soluciones inteligentes y sostenibles ya no es una opción: es una necesidad urgente para garantizar un futuro más seguro y próspero para todos.